EFEMÉRIDES SÍSMICAS: TERREMOTO DE PUNITAQUI 1997


El 14 de octubre de 1997, a las 22:03 hora local, un sismo magnitud 7.1 Mw, con coordenadas hipocentrales -30.773 Latitud, -71.315 Longitud y 56 km de profundidad (8 kilómetros al noroeste de Punitaqui, Región de Coquimbo), afectó el norte de Chile.

El sismo fue percibido entre las regiones de Antofagasta (II) y del Bío Bío (VIII). Los reportes oficiales dieron cuenta de ocho personas fallecidas producto del terremoto y más de 300 heridas. Al menos 5 mil viviendas fueron destruidas y alrededor de 15.700 resultaron dañadas principalmente en los alrededores de la zona epicentral.

Mario Pardo, subdirector del Centro Sismológico Nacional, indica que “se trató de un terremoto intraplaca de profundidad intermedia, ocurrido producto de una ruptura al interior de la placa de Nazca, que subducta bajo la placa Sudamericana, bajo la zona de contacto, por lo que no generó las condiciones necesarias para provocar un tsunami”.

El sismólogo agrega que “este terremoto generó mucho daño en superficie, principalmente en estructuras rígidas como las de adobe, por el mayor contenido en altas frecuencias que radia un terremoto de estas características cuando rompe la placa, que no es igual que cuando una placa se desliza contra la otra (interplaca) que es el caso más frecuente en Chile”. Pardo indica que además este terremoto “tuvo la particularidad de que los esfuerzos para romper la placa fueron por compresión no por extensión como se esperaría en sismos de esa profundidad”.

En general la placa subductada, bajo el contacto interplaca, está sometida a esfuerzos de extensión debido a que su propio peso tira de ella hacia abajo; dado que en el contacto interplaca está acoplada (no puede moverse debido al roce), se romperá en un fallamiento normal.  En cambio en el caso del terremoto de Punitaqui es todo lo contrario, corresponde a un evento de compresión, la zona está siendo apretada debido a que la placa se está flexionando, hasta que se quiebra en una falla inversa. La placa de Nazca en la zona de Punitaqui tiene una geometría casi paralela a la superficie de la Tierra a profundidades del orden de 100 km, fenómeno conocido como una subducción plana y eso hace que los esfuerzos en el interior de la placa generen compresión. Además, esta geometría plana de la placa en profundidad, genera ausencia de volcanes activos entre Copiapó y Santiago, explica el subdirector del CSN.

Terremoto_punitaqui

A este terremoto se lo ha relacionado con el de 1943, ya que afectó la misma zona, pero el sismo de 1943 fue de subducción, es decir interplaca, siendo muy similar al terremoto de Illapel de 2015. ¿Entonces no existe relación entre los sismos intraplaca e interplaca? Mario Pardo señala que “en los meses previos al terremoto de Punitaqui hubo actividad sísmica en la costa frente a Coquimbo y La Serena con eventos magnitud sobre 6 de carácter interplaca, eso se interpreta como una redistribución de esfuerzo, en la que éstos se profundizaron hacia la zona de Punitaqui gatillando el terremoto principal”. Además, el proceso de réplicas del terremoto de Punitaqui incluyó eventos magnitud sobre 6 de carácter intraplacas, pero también generó réplicas interplacas, estas últimos de carácter más profundo, lo que produjo reacomodo de esfuerzos y debilitamientos que posiblemente años más tarde habrían jugado un rol importante en la generación del terremoto de Illapel 2015.

Lecciones

“Este sismo fue bastante importante respecto de las lecciones que se aprendieron, una es que los terremotos intraplaca producidos a profundidades mayores a la del contacto sismogénico genera daños distintos a  los de los terremotos de subducción interplaca, pese a estar a una distancia  y tener una magnitud similar. Esto debido a que este tipo de rupturas producen mayor radiación de energía en altas frecuencias lo que genera mucho daño en estructuras rígidas”, indica, el subdirector del CSN.

Más información sobre este terremoto:  M. Pardo et al. / Tectonophysics 345 (2002) 199–210