Encargada del Laboratorio de Geodesia Satelital de la UNAM visitó el CSN


Sara Franco, encargada del nuevo laboratorio que coordinará la instalación y uso de datos de los sistemas de posicionamiento satelital para el Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), realizó una pasantía de dos semanas en el Centro Sismológico Nacional (CSN) para conocer cómo se ha desarrollado la red geodésica en Chile y cómo se utilizan los datos obtenidos.

Entre el 27 de marzo y el 8 de abril, la encargada de impulsar la adquisición de datos GPS para las diferentes áreas de Ciencias de la Tierra en la UNAM, visitó el CSN para conocer la experiencia adquirida en nuestro país, con el fin de incorporar el uso de estos datos en las rutinas de los distintos departamentos al interior del Instituto de Geofísica, entre ellos el Servicio Sismológico Nacional (SSN) de México que depende de dicha unidad académica.

Sara Franco cuenta que el Laboratorio de Geodesia Satelital de la UNAM es un proyecto relativamente nuevo, fue creado en abril de 2016, y que si bien desde hace años que el Instituto de Geofísica cuenta con instrumentos GPS instalados en distintas parte de México producto de diversos proyectos de investigación, entre ellos los del Servicio Sismológico, estos datos no son transmitidos en tiempo real. Fue ésta una de las principales razones que la trajo a Chile. “Vengo a ver cómo están solucionando el tema de las posiciones globales satelitales de alta frecuencia en tiempo real”, explica Sara, para ello trabajó con Juan Carlos Báez, jefe de Geodesia del CSN.

La doctora en ciencias agrega que “parte del objetivo es incorporar los datos GPS como una herramienta de rutina en los distintos departamento; una de las aplicaciones que nos interesa mucho, por ejemplo, es el cálculo de la magnitud, sabemos que ustedes lo hacen con Fase W utilizando datos de GPS”, para conocer ese método trabajó con Sebastián Riquelme, jefe de Operaciones del CSN.

Agrega que una vez acá “me enteré de que tienen modelos de inversión para ver los desplazamientos que generan los terremotos, metodología que para nosotros también es bastante útil”, esa aplicación la conoció de la mano de Francisco del Campo, Geofísico de innovación del CSN. Mientras que trabajo de adquisición de los datos lo revisó con David Pineda, Informático de Geodesia del CSN. “Si bien venía a ver algo muy concreto, ahora se ha abierto todo un panorama, lo cual me compromete mucho porque llegar con toda esta visión de vuelta a México me obliga a hacer cosas”, indica Sara.

Respecto de las diferencias entre la realidad chilena y la mexicana, la investigadora explica que “la densidad de cobertura de nuestra red en términos simológicos no es tan diferente, pero en cuestión e GPS sí. Nosotros también tenemos un área de subducción grande, pero nuestra densidad de estaciones GPS dedicadas a esto es muy baja. Ustedes tienen más de cien, mientras que nosotros en nuestra red contamos con 30 del Servicio Sismológico, de las cuales 17 están en la costa (cercanas a la zona de subducción). A eso se suma que nuestros sismos son más pequeños, y con menos densidad de instrumentos tenemos menos resolución, pero creo que aun así podemos comenzar a hacer pruebas”. Además, sumando las estaciones GPS de los distintos departamentos del Instituto de Geofísica calcula que podrían llegar a los 200 instrumentos distribuidos en todo el país, entonces “vale la pena que toda la red sea una sola y esa es la idea de este laboratorio”, indica la doctora en ciencias, muy conforme con su visita al CSN y esperanzada en que en un corto plazo “el Laboratorio de Geodesia Satelital sea el lugar donde se estén generando los productos, las series de tiempo, los análisis en tiempo real y se estén distribuyendo los datos a todos los usuarios interesados”.